Violencia doméstica y embarazo

El abuso puede empezar o empeorar cuando la mujer queda embarazada. Los datos muestran que, cada año, alrededor de 324,000 mujeres sufren abuso durante el embarazo. El abuso nunca está bien. El abuso durante el embarazo no solo le hace daño a la mujer embarazada, sino que también le puede hacer daño al niño que va a nacer. Las mujeres que están embarazadas y sufren abuso pueden:

  • Recibir golpes en el abdomen, la cabeza u otras partes del cuerpo
  • Ser obligadas a tener el parto con personas o en lugares que no son seguros
  • Ser obligadas a trabajar más de lo saludable
  • Recibir burlas por haber subido de peso
  • Ser obligadas a tener relaciones sexuales o ser engañadas durante el embarazo
  • Ser privadas de dinero para medicamentos o vitaminas
  • Ser privadas de alimentos saludables o descanso
  • No tener permitido guardar dinero para ropa de maternidad o artículos para el bebé
  • No tener permitido ir al médico o hacerse pruebas médicas
  • Ser obligadas a consumir drogas o alcohol
  • Tener que oír que les pueden suceder cosas tristes o alarmantes a ella o al bebé después del parto

Las situaciones de abuso pueden poner a las mujeres en riesgo de sufrir problemas de salud graves. Pueden correr el riesgo de contagiarse de infecciones de transmisión sexual o tener futuros embarazos no deseados. Les puede subir demasiado la presión sanguínea. También pueden tener un sangrado desde el interior del cuerpo que ponga en peligro o le cause la muerte a la madre o al bebé.

El bebé puede nacer con una adicción a las drogas o al alcohol. El bebé puede nacer demasiado pronto o pequeño, y no poder respirar o comer por sí solo durante un tiempo. El bebé puede morir antes de nacer o tener problemas de salud al nacer.

Usted no es responsable del abuso. Existe ayuda para usted y su bebé. Para encontrar el programa contra el abuso doméstico más cercano, visite http://pcadv.org y haga clic en Find Help (Conseguir ayuda) o use el mapa de Find Help que está en la página de inicio.

  • Para comunicarse con la Línea Directa Nacional de Violencia Doméstica, llame al 1-800-799-7233 | 1-800-787-3224 (TTY)
  • Para comunicarse con la Línea Directa Nacional de Abuso en las Citas, llame al 1-866-331-9474 o envíe un mensaje de texto que diga loveis al 22522.