Salud, dinero y abuso doméstico

Obstaculizar el acceso de una persona al dinero es una forma de abuso doméstico. El abuso doméstico puede provocar problemas de salud en las víctimas. Una víctima con problemas de salud puede necesitar dinero para pagar los servicios de un médico. Esa persona podría necesitar dinero para medicamentos o para desplazarse hasta la clínica. Los abusadores pueden negar dinero o recursos para cubrir las necesidades de los hijos.

Las personas con problemas de salud provocados por situaciones de abuso pueden necesitar atención médica inmediata. Una persona también puede vivir con problemas de salud a partir del abuso durante mucho tiempo.

Esos problemas pueden incluir:

  • Quebraduras de huesos o dientes
  • Hematomas o hemorragias
  • Heridas de puñalada o de arma de fuego
  • Lesión en la cabeza
  • Ansiedad o depresión
  • Trastornos alimentarios
  • Problemas estomacales o cardíacos
  • Consumo de drogas o alcohol
  • Embarazo no planificado
  • Infección de transmisión sexual

Un abusador puede prohibirle a una persona que trabaje, por lo que, probablemente, esa persona no pueda acceder a un seguro médico. Un abusador también puede hacer que despidan a una persona de un trabajo, y esto podría dar lugar a una calificación de crédito negativa. Una víctima sin empleo puede sentirse atrapada e imposibilitada para mudarse a un hogar seguro. Todo esto significa que una persona abusada podría necesitar dinero o atención médica y no poder obtenerlos.

No permitir el acceso de una persona a uno de los siguientes recursos o a todos ellos implica abuso:

  • Médico
  • Medicamentos
  • Dinero
  • Trabajo
  • Un hogar seguro
  • Buena calificación de crédito
  • Educación

La Ley de Atención Médica Asequible establece que no se le debe negar seguro médico a una víctima de abuso doméstico. La fundación Allstate Foundation ofrece herramientas de aprendizaje en línea para ayudar a las personas que han sobrevivido al abuso y para aquellas que necesitan dinero o desarrollar habilidades de búsqueda de empleo.

Para buscar el programa de abuso doméstico más cercano, visite Pennsylvania Coalition Against Domestic Violence y haga clic en Find Help (Buscar ayuda) o utilice el mapa de Find Help que se encuentra en la página de inicio.

Para comunicarse con la línea nacional sobre violencia doméstica, llame al 1-800-799-SAFE (7233).

Para TTY, 1-800-787-3224.