¿Estás en una relación sana?

En una relación sana hay respeto por los sentimientos de la pareja. Hay respeto por los intereses y deseos de esa persona. Las palabras, emociones y acciones son positivas y de apoyo. La cantidad de mensajes de texto y llamadas no controlan tu tiempo.

Usa las siguientes preguntas para comenzar a analizar qué tan sana es tu relación:

¿La persona con quien salgo:

  • ¿me juzga? ¿No tiene interés en las cosas que me importan a mí? 
  • ¿no quiere darme mi propio espacio? ¿Ni me permite pasar tiempo con mis amigos? 
  • ¿acapara todo mi tiempo con mensajes de texto y llamándome para preguntarme dónde estoy, qué estoy haciendo y si lo/la amo? 
  • ¿me pide que me vista de cierta manera, usando más o menos ropa? 
  • ¿me acusa de estar coqueteando o flirteando cuando hablo con otra gente? 
  • ¿me pide la contraseña de mi cuenta de Facebook? 
  • ¿dice cosas inesperadas para que me cuestione si dije o hice algo que lo/la haya hecho enojar? 
  • ¿me amenaza a mí o amenaza mis cosas? 
  • ¿dice que está “jugando” cuando me lastima físicamente? 
  • ¿dice que está “bromeando” cuando me menosprecia o me hace sentir inferior? 
  • ¿me presiona para que tengamos un hijo? 
  • ¿se olvida de su rol en la prevención de embarazos o a menudo tiene otros problemas con los métodos anticonceptivos?

Si respondes “sí” a alguna de estas preguntas, es posible que estés en una relación enfermiza. Cuantas más preguntas hayas respondido con “sí”, mayor será el riesgo de que seas víctima de abuso en tu pareja.

El abuso en las parejas puede afectar tanto a muchachos como a muchachas, ya sea que sean heterosexuales, bisexuales, gays o lesbianas. Además, puede sucederles independientemente de su religión o de cuánto dinero tengan.

Si necesitas más información sobre las relaciones sanas o el abuso en la pareja, puedes: